Cuando los opuestos se tocaron

Tiempo de lectura: 2 minutos

Xabi Prieto y el Loco Abreu compartieron posiciones de ataque en la Real Sociedad, como se ve en la fotografía, con los colores verde y amarillo del San Sebastian Recreation Club de 1904, embrión de la Real Sociedad.

El principio de polaridad del Kybalión establece que todo tiene dos polos, su par de opuestos, que no son en realidad sino los extremos de una misma cosa. En este caso de la manera de entender el fútbol. Xabi Prieto y el Loco Abreu representan dos formas opuestas, hasta el extremo, de entenderlo y de vivirlo.

Cuando Xabi Prieto (Donostia, 1983) era un niño, no soñaba con ser futbolista, sino con jugar en la Real, como ha repetido en varias ocasiones. Este propósito es clave para entender su trayectoria, su fidelidad a un club, a un escudo, a unos colores; su manera, en definitiva, de vivir el fútbol.

Oportunidades para cambiar de aires no le faltaron: Liverpool, Valencia, Ajax, Olympique de Marsella y Athletic en “dos o tres” ocasiones, tocaron a su puerta, pero Xabi Prieto tenía claro que el momento de salir, de despedirse de su equipo, de su estadio, de su afición, llegaría cuando decidiera colgar las botas para irse a su casa.

Y así, fue. Cuando, después de 17 años en el equipo de su vida, con el que jugó 532 partidos y metió 74 goles, decidió llegado el momento de decir adiós, y hacerlo como un One Club Man.

Washington Sebastián ‘Loco’ Abreu (Minas, Uruguay, 1976) es el polo opuesto. Para el Loco Abreu lo importante no era el club, sino el fútbol. Su espíritu nómada, lo convirtió en un trotamundos, un peregrino del fútbol, que no consiguió echar raíces en ninguna parte.

Lillo lo trajo a la Real en enero de 2009, en el mercado de invierno, y el Loco respondió a su confianza con 11 goles en 18 partidos; pero al finalizar la temporada se fue, porque el entrenador no renovó. “Es mi forma de ser. Si se iba él, me iba yo”.

Así vivía el fútbol el Loco Abreu, volando de flor en flor. Decía que “el futbolista muere dos veces, una cuando se retira y deja para toda la vida algo que ama, y otra, cuando Dios toma la decisión de llevarlo”. La primera le llegó con 26 años de profesión, después de haber jugado en 32 equipos diferentes de 11 países, habiendo metido 404 goles en 787 partidos.

Xabi Prieto recibió la Insignia de Oro y Brillantes de la Real Sociedad y el Loco Abreu tiene el récord Guinness de ser el futbolista que ha jugado en más clubes de forma profesional. Dos maneras distintas, opuestas hasta el extremo, de entender el fútbol, que se tocaron para dar lo mejor de sí a la Real Sociedad.

Una respuesta a «Cuando los opuestos se tocaron»

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *